Aunque nunca nos hayamos distinguido por un especial digamos que… apego a la monarquía y aunque nunca nos hayamos considerado súbdito de más reino que no fuera el del patriotismo y la libertad, siempre nos hemos mostrado respetuoso con la Corona por lo que significaba pero, lo del yernísimo acaba de rematar nuestra escasa afección a la realeza y la majestad de la sangre azul.
Parece ser que el chiquito éste, haciendo uso y disfrute de su privilegiada posición social y una flipante falta de escrúpulos, se ha forrado sin necesidad, simplemente por egoísmo, ruindad y desmedida avaricia, vamos, lo más propio de un noble yerno del Rey.
Si el muchacho este no tiene dote alguna del suegro y no se le conoce oficio retribuido o más dedicación diaria que no fuera la de tocarse a dos manos los kinders, no queremos ni pensar de donde habrá sacado los seis millones de pavos que le costó la casita de Barcelona y los más o menos otros cuatro que fundió para ponerla chachipiruli.
Mal se le presenta la cosa si como se dice la justicia es igual para todos. La imputación con cargos de prevaricación, malversación, fraude a la administración y falsedad documental son como para cuando menos ponerse un corcho pero lo peor, lo más indignante es que para ello utilizara mezquinamente como tapadera una oenegé, el Instituto Nóos.
Que el Duque falsifique facturas a diestro y siniestro, que se forre de pasta gansa sin doblar el espinazo, que su patrimonio crezca hasta la ostentación y no se entere ni el tato en su familia, cuando menos da que pensar y mal por cierto de cuantos le rodean.
El hipócrita respeto hacia la delicada situación en la que se encuentra la infanta y el beato silencio impuesto en cuanto al monarca y su presunto desconocimiento de lo que pasaba, no favorece en absoluto al devenir de la corona y mucho nos tememos que los pagainfantas que poblamos el Reino pasaremos de la afección a la corona a la afición por la coronita.
La situación de la monarquía nos recuerda una frase que decía algo así como… "Si corres mucho es muy posible que te hundas en el pantano pero en cambio, si vas despacio… es muy posible que te hundas en el pantano.
Me quedo con la cerveza.
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